9 Claves para saborear más intensamente la vida.
Publicado por jmvicedo el martes, 26 de enero de 2010 a las 2:53 p. m..
Imagen JadeXJustice1.-Aprende a centrarte en el presente.
Son muy pocas las personas que saben realmente estar presentes en el presente. La gran mayoría está en el presente con su cabeza en el pasado o en el futuro que está por venir. Y desde esa posición no puede disfrutarse en plenitud nuestro presente. Haz un esfuerzo consciente por estar en cada momento totalmente centrado y presente en lo que estés haciendo. De ese modo comenzarás a sacar el verdadero jugo a cada una de las experiencias de tu vida.
2.-Haz menos para lograr más.
En muchas ocasiones es precisamente ese afán constante que mantenemos de lograr más y más lo que nos impide avanzar y concentrarnos adecuadamente. Una cantidad de acción adecuada a nuestro propósito y capacidad en cada instante es fundamental para evitar sentirnos frustrados. Muchas veces simplemente definiendo un orden claro de prioridades y marcando que acciones son las realmente importantes dentro de un proyecto, se avanza mucho más que corriendo a toda velocidad sin una dirección y un propósito definido y claro. Además, cuando consigues esa sensación de ser realmente efectivo en tus acciones, tu motivación y entusiasmo se dispara y finalmente siempre terminarás logrando mejores y mayores resultados.
3.-Desconecta totalmente de vez en cuando.
Nada recarga más de energía que tomar algún momento de vez en cuando para desconectar de nuestras tareas habituales y hacer algo totalmente diferente. Y no es necesario que sean “grandes” desconexiones. En muchas ocasiones simplemente tomando algunos minutos para relajarnos haciendo algo totalmente diferente y que nos haga disfrutar será suficiente. Tras esos minutos tu energía habrá crecido y serás capaz de volver a centrarte en tu proyecto logrando generar resultados de mayor calidad.
4.-Busca algo de tiempo todos los días para cuidarte y premiarte.
Estamos tan ocupados tratando de conseguir resultados que en muchas ocasiones nos olvidamos hasta de nosotros mismos. No cometas ese error. Has de cuidar lo más valioso que posees, que no es otra cosa que tu mismo. Crea el compromiso de dedicar algo de tiempo cada día para cuidarte tanto a nivel físico, como a nivel emocional y espiritual. Nadie puede dar lo que no tiene. Si tu no tienes amor, no puedes dar amor. Si no tienes entusiasmo, no puedes dar entusiasmo. Si no tienes dinero, no puedes dar dinero. Tu eres la fuente de todo cambio que quieras producir tanto en ti como a tu alrededor. Así pues esa es una gran prioridad: cultívate, cuídate, prémiate,… y de ese modo serás capaz de enriquecer tu vida y también la vida de los demás.
5.-Haz que el tiempo que pasas con tus seres queridos sea un tiempo de calidad.
Procura que el tiempo que pasas con tu familia y tus seres queridos sea un tiempo de calidad. Cuando estés con ellos, trata de estar plenamente con ellos. Son muchas las personas que cuando están con sus hijos o su pareja, están mentalmente en otro lugar: pensando en sus problemas en el trabajo, en cosas que tienen pendientes,… Cuando estés con ellos, aparca todo lo demás. Céntrate en disfrutar esos momentos con ellos estando plenamente presente para ellos. Y desde ese enfoque de estar plenamente presente descubrirás que vuestras relaciones personales se enriquecerán muchísimo más.
6.-Recarga tu energía a través de la respiración.
Graba esto con fuego en tu mente. Oxígeno igual a vida. Podemos estar muchos días sin comer (Muchos más de los que la mayoría se imagina). Podemos estar unos pocos días sin beber. Ahora, ¿Cuánto tiempo podemos estar sin respirar?... Una respiración adecuada es una de las grandes claves para gozar de buena salud y disfrutar de un estado emocional más positivo y poderoso. Vigila tu patrón de respiración y proponte hacer algunos ejercicios diarios si estimas que necesitas mejorar tu respiración. Simplemente mejorando tu patrón de respiración notarás una mejora espectacular en tus niveles de energía.
7.-Aprende a enfocar tu atención en una sola cosa cada vez.
El ser capaz de concentrarte y enfocar la atención en una única cosa cada vez multiplicará tu capacidad para lograr resultados de calidad. Son muchas las personas que cuando están haciendo algo, piensan simultáneamente en otras muchas cosas que tienen pendientes de hacer. Eso lo único que hace es restar energía y recursos. Actuar de ese modo no va a aportar nada a esas tareas pendientes, sino todo lo contrario. Lo único que conseguirás es sentirte abrumado por todo lo que todavía está pendiente de hacer. Una cosa detrás de otra. Imagina que eres como un rayo láser que basa todo su poder en un a tremenda concentración de energía en un único punto. Así es como se producen verdaderos resultados.
8.-Come más despacio y saborea intensamente tus comidas.
Muchas personas no comen, engullen. Nuestra alimentación, aparte de ser nuestro mecanismo para generar energía puede ser una fuente de increíble placer y satisfacción. Proponte saborear más intensamente y disfrutar cada una de tus comidas. Y no me estoy refiriendo aquí a que cada una de tus comidas se convierta en algo sofisticado y sibarita. Simplemente me refiero a que el simple hecho de comer de manera más consciente nos aportará una perspectiva totalmente diferente y mucho más placentera, aunque estemos comiendo lo mismo de siempre. Haz de tus comidas un momento verdaderamente regenerador y placentero.
9.-Toma unos instante para agradecer el milagro de la vida.
La gratitud es una de las emociones más poderosas que existe. Cuando nos sentimos agradecidos, nos sentimos plenos. Y no hay mayor razón para sentir gratitud que el simple hecho de estar vivos. Si estas leyendo estas líneas tienes el mayor don y regalo que puedes poseer: la vida. Toma conciencia de ello y siéntete bendecido y agradecido. Cada instante de tu vida, si tu así lo deseas es una nueva oportunidad para cambiar, crecer y superarte. Da gracias por ello. Y lo más importante, aprovecha ese maravilloso regalo y comienza a tomar acción sin mayor dilación devolviéndole a cambio a la vida la puesta en juego de tu máximo potencial.
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¿Qué es realmente el equilibrio?
Publicado por jmvicedo el viernes, 22 de enero de 2010 a las 7:30 p. m..
Uno de los conceptos más tratados cuando se habla de desarrollo personal es el concepto de equilibrar todas las áreas de la vida. Y un error muy común es pensar que equilibrar las áreas de la vida consiste en dedicar la misma cantidad de tiempo a cada una de esas áreas. Esa postura conduce inevitablemente a la frustración ya que ese reparto equitativo del tiempo es un tarea literalmente imposible. Nuestra vida es un fluir continuo de actividades, que van cambiando constantemente y que no permiten ese tipo de estructuras tan cuadriculadas. La vida no es estática, sino dinámica.
Permíteme que te lo ilustre con un ejemplo. Imagina a una persona que ha tomado la decisión de iniciar un proyecto de negocio. A buen seguro en esa fase inicial de su negocio tendrá que dedicar una gran parte de su tiempo a ese proyecto para que se ponga en marcha con unas mínimas garantías de éxito. En ese momento de su vida, el equilibrio para esa persona dada su situación supondrá más horas dedicadas a su proyecto empresarial que a su familia. Ese “desequilibrio” temporal de tiempo a favor de su negocio supondrá sin duda una contribución positiva al equilibrio general de su vida.
Y por la misma razón si esa misma persona en un momento determinado tiene que afrontar por ejemplo el cuidado de sus padres ancianos, deberá dedicar más tiempo a esa faceta familiar de su vida. De nuevo ese aparente “desequilibrio” dedicando más tiempo a su familia es realmente algo que aportará equilibrio a su vida.
Así pues, el verdadero equilibrio es aquel que se adapta en cada instante a nuestra situación. Es un concepto que no entiende de medidas ni porcentajes. Es más una sensación que obtenemos cuando nos dejamos guiar por nuestros valores y principios fundamentales. Se consigue a través de esa sabiduría interior que nos muestra claramente lo que es apropiado en cada momento de nuestra vida. Sin duda, si hiciésemos más caso a esa “brújula interior” que todos tenemos, nos resultaría mucho más sencillo acoplar las diferentes áreas e intereses de nuestra vida de un modo que nos aporte verdadera realización. Y cuando uno toma conciencia de este concepto de equilibrio se produce una verdadera liberación.
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Controlando tu diálogo interno.
Publicado por jmvicedo el miércoles, 20 de enero de 2010 a las 7:22 p. m..
Imagen kevindooleySi tuvieses un amigo que te hablase todo el día del mismo modo en que tu te sueles hablar a ti mismo, ¿Cuánto tiempo seguiría siendo tu amigo?
Desafortunadamente para muchas personas el diálogo interno que mantienen es poco menos que demoledor. Literalmente son sus peores enemigos. Pasan gran parte de su tiempo “bombardeándose” con mensajes negativos del tipo de: “no soy lo suficientemente inteligente”, “no tengo preparación”, “me faltan recursos”, “ no voy a ser capaz de lograrlo”,… Y obviamente, en muchas ocasiones, a base de repetición y repetición, estos mensajes terminan calando y suponen un lastre a la hora de sentirnos realizados y avanzar hacia nuestros objetivos.
Hemos de tomar conciencia del modo en que nos afecta nuestro diálogo interno, cambiándolo si es necesario para que realmente nos aporte recursos en lugar de restarnos. Tu has de convertirte en tu mejor aliado. Un diálogo interno poderoso y positivo, te aportará la fortaleza necesaria para enfrentar cualquier tipo de reto que te plantees. Igual que pueden calar los mensajes negativos, también calan los mensajes positivos. Y el mejor modo de comenzar a transformar nuestro diálogo interno es detectando primero su calidad actual, y proponiéndonos activamente transformarlo poco a poco en un diálogo que te motive de manera positiva y poderosa.
Cada vez que te des cuenta que estas cayendo en una dinámica de pensamiento negativa, cámbiala inmediatamente. Sustituye esas frases negativas por otras positivas que las contrarresten de manera poderosa. Chequea con frecuencia la calidad de tu diálogo interno, y pronto te darás cuenta de que va tomando forma un nuevo hábito de pensamiento positivo desde el que podrás construir una actitud a toda prueba. Y en el proceso, a buen seguro que descubrirás que muchas de las cosas que ahora te parecen difíciles o incluso imposibles, comienzan a transformarse en fantásticas posibilidades.
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Márcate el reto de hacer algo realmente interesante.
Publicado por jmvicedo el domingo, 17 de enero de 2010 a las 4:14 p. m..
¿Y acaso no es ese el objetivo último de la vida? Esa sensación de que la vida tiene un propósito y que cada instante es una oportunidad de crecer, cambiar y mejorar.
Piensa por un instante en algún proyecto que realmente sea interesante para ti. Tal vez algún anhelo o deseo sobre el que hayas estado pensando durante mucho tiempo pero nunca te has atrevido a dar el paso para convertirlo en realidad. ¿No crees que quizás ha llegado el momento de marcarte el reto de perseguirlo?
Siempre digo en mis cursos y seminarios que, independientemente de nuestras circunstancias y resultados hasta este momento, cada instante de nuestra vida es una nueva oportunidad para comenzar a construir la vida de nuestros sueños. ¿Por qué no empezar ahora mismo con ese proyecto con el que hasta ahora no te habías atrevido? ¿Por qué no apartar por un instante tus miedos y complejos y comenzar a tomar acción en pos de ese sueño? Leía hace poco un graffiti que realmente llamó mi atención. Decía:
“No tengas miedo a fracasar. Ten miedo a no intentarlo.”
No puedo estar más de acuerdo. El mundo se está perdiendo montones de proyectos apasionantes porque muchas personas tienen un miedo excesivo a fracasar, al que dirán, a su falta de recursos,… Por supuesto que hay que sopesar riesgos y opciones, pero muchas veces en esos anhelos especiales de nuestro corazón es donde se encuentra nuestra auténtica realización esperándonos. A pesar de las dificultades que implique el avance y su logro. En mi caso personal, y en el de otros muchos grandes realizadores que he tenido el placer de entrevistar, algunos de los mejores recuerdos de sus vidas se hayan vinculados a proyectos que les apasionaban y en los que pusieron todo su empeño, aunque en ocasiones esos proyectos finalmente fracasasen. Lo apasionante es el proceso. La sensación de estar creando algo que tu crees que realmente merece la pena. El reto de desarrollarte y tener que crecer en habilidades para avanzar hacia tu objetivo. En una simple frase: esa apasionante sensación de saber que estas inmerso en un proceso de mejora constante y sin fin.
Sin un proyecto apasionante que perseguir es bien difícil desatar todo tu máximo potencial. Pero con tu mira puesta en un proyecto que realmente te apasione, tu energía y tu capacidad se multiplicarán. Comenzarás a sentir tus días, tus horas y minutos de un modo bien diferente. Tu vida comenzará a llenarse de propósito y dirección. Serás capaz de tomar más y mejores decisiones… Y el simple punto de partida es marcarte el reto de dedicar al menos parte de tu tiempo a un proyecto que realmente te apasione.
Así pues, te animo a que enciendas tu pasión y te marques el reto de perseguir algún proyecto que sea realmente interesante para ti.
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9 claves para convertirte en una persona de acción (Parte 2).
Publicado por jmvicedo el jueves, 14 de enero de 2010 a las 8:03 p. m..
Imagen: metheocratea
Cuando ante un proyecto enfocas básicamente en lo fundamental todo se vuelve más sencillo y es más fácil motivarse para tomar acción. Si desglosas un proyecto en demasiadas tareas, corres el riesgo de sentirte abrumado y desbordado por todo el trabajo que vas a tener que hacer. Enfoca primero solo en los pasos fundamentales, y posteriormente ya irás afinando más y más conforme sea necesario al ir avanzando el proyecto.
6.-No confundas el movimiento con la acción.
Con esto me estoy refiriendo a que el objetivo no es simplemente estar en movimiento. El objetivo es tomar acción que nos lleve a un objetivo que hemos definido. No se trata de parecer que estamos muy ocupados. Como suelo decir en alguno de mis cursos, hay muchas personas que “parece que hacen pero no hacen”. La acción no es coger los papeles de un lado de tu escritorio para pasarlos al otro lado del escritorio. Eso no es acción, eso simplemente se llama perder el tiempo. No te auto engañes. No caigas en la trampa de “simular” que estas haciendo cuando lo que realmente haces es “moverte”. El simple movimiento no es acción. Toda acción es verdadera cuando tiene un sentido y nos hace avanzar hacia un objetivo.
7.-El pensamiento negativo bloquea la acción.
Vigila con frecuencia tu patrón de pensamiento. Sobre todo cuando vayas a emprender algún proyecto. Los comentarios negativos de los demás ciertamente pueden desmotivarnos, pero nada va a desmotivarte más que tus propios comentarios negativos. Todos los grandes realizadores basan gran parte de su éxito en un patrón y una actitud mental positiva. Son los principales artífices de su propia motivación. Ante cualquier proyecto se repiten una y otra vez que ellos pueden hacerlo. Se ven concluyendo el objetivo, creciendo, avanzando. Su patrón de pensamiento positivo literalmente “tira” de ellos hacia su objetivo como si de un gigantesco imán se tratase. Así pues, vigila tu actitud mental y trata de mantenerte en la parte positiva de la balanza todo el tiempo que te sea posible. Tu capacidad de tomar acción se multiplicará.
8.-Planificar no es acción.
No confundas planificar con tomar acción. La planificación es el paso previo a la acción, pero solo con planificación jamás conseguirás resultados. Has de dar el paso decisivo del plan a la acción. Ahí es donde se encuentran de verdad todas las recompensas. La planificación correcta es importante, pero lo más importante es la ACCION masiva siguiendo las directrices de ese plan. Ese es el momento en que los objetivos comienzan a acercarse a la realidad.
9.-Lo importante es el ahora.
Para muchas personas su principal obstáculo a la hora de tomar acción es justamente no ser capaz de centrarse en este preciso instante, en el AHORA. Son muchos los que no dejan de pensar en el pasado, en otros intentos realizados que no funcionaron, en sus problemas y lastres…Y otros muchos que no paran de anticipar posibles problemas que pueden surgir en el futuro cuando se pongan en marcha. Estas dos posturas son enemigas acérrimas de la realización. Lo único que nos pertenece realmente es el AHORA, este preciso instante. Y en este punto es en el único en el que puede nacer la acción. Así pues, deja de pensar en el pasado o en el futuro, y céntrate de una vez por todas en el presente. ¿Qué acción puedo tomar ahora? Y a continuación solo resta una cosa que hacer: Actuar en consonancia a esa respuesta. Esa es la esencia de todos los grandes realizadores. En el momento presente emprenden las acciones más poderosas posibles para avanzar hacia sus objetivos.
Aquí y ahora.
Este es el momento de la ACCIÓN.
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9 claves para convertirte en una persona de acción (Parte 1).
Publicado por jmvicedo el martes, 12 de enero de 2010 a las 5:40 p. m..
Nunca me canso de decir y repetir que es solo a través de la ACCION como accedemos a nuestros logros y sueños. Si quieres cambiar y mejorar algo en tu vida solo hay un camino y ese camino se llama “emprender acción”. Por mucho que desees, sueñes, planifiques, etc… de nada te servirá hasta que no entres en el terreno donde todo se transforma mediante tus acciones.
Pero a muchas personas les cuesta precisamente entrar en ese territorio. Les cuesta dar el paso de las intenciones a las acciones poderosas y continuas. Permíteme que te muestre a continuación algunas claves que pueden ayudarte a transformarte en una persona verdaderamente de acción:
1.-La perfección no existe.
Son muchas las personas a las que les paraliza el hecho de pensar que sus acciones no serán lo suficientemente buenas o no producirán el estándar de resultados que ellos creen perfecto. No cometas ese error. La perfección absoluta no existe. Todo puede ser hecho siempre mejor. Pero llega un momento en que no compensa la diferencia de esfuerzo requerida para mejorar algo y la mejora producida. Así que es importante que comprendas que lo más importante no es que sea perfecto. Lo más importante es que sea hecho. De nada sirve algo que ni siquiera se intenta por creer que el resultado no será perfecto.
2.-Si piensas demasiado corres el riesgo de quedar paralizado. La parálisis del análisis.
Aunque obviamente en la mayoría de las ocasiones es necesario y recomendable pensar antes de actuar, un exceso de pensar también puede ser contraproducente. Infinidad de proyectos han quedado sin realizar porque sus “impulsores” le han dado demasiadas vueltas al tema y finalmente a base de tanto pensar han comenzado a crear demasiados “obstáculos mentales” contra su proyecto. Los grandes realizadores sopesan los riesgos, pero inmediatamente se lanzan a la acción entendiendo que en cualquier proyecto que realmente merezca la pena van a surgir siempre obstáculos.
No te conviertas en una víctima más de la parálisis del análisis: la incapacidad de tomar una decisión y tomar acción o bien por creer que te falta información, o por tener tanta información que no sabes como manejarla.
Un buen consejo es pensar y reflexionar lo justo, y después lánzate a la acción. Los problemas que vayan surgiendo más adelante ya te encargarás de solucionarlos sobre la marcha.
3.-Gran parte del secreto es simplemente empezar.
Hay algo muy poderoso en el simple hecho de comenzar a generar movimiento. Es como un objeto que adquiere velocidad y a partir de ese instante se genera una inercia en la dirección del movimiento. Con tus proyectos y tus sueños sucede lo mismo. El avance genera motivación. Y esa motivación es una fuerza impulsora que generará inercia positiva y de avance en tu proyecto. Una vez comiences, te darás cuenta de que una acción te lleva a la siguiente y todo el proceso comienza a generar velocidad.
4.-Muchas tareas son difíciles solamente en la mente. Cuando se comienzan a hacer se vuelven sencillas.
A la hora de tomar acción uno de nuestros principales enemigos en muchas ocasiones es nuestra propia mente. Seguro que en más de una ocasión has estando postergando algún proyecto porque pensabas que iba a ser muy difícil o pesado, y cuando por fin tomaste la decisión de iniciarlo y realizarlo, te diste cuenta de que en realidad no era tan complicado. Muchas veces nuestra mente magnifica el tamaño y el trabajo que nos llevará realizar un proyecto. Y si caemos en esa trampa corremos el riesgo de quedar “paralizados” por esos propios pensamientos que nos abruman.
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Hábitos de excelencia: El fundamento de los grandes logros.
Publicado por jmvicedo el domingo, 10 de enero de 2010 a las 5:12 p. m..
Si quieres transformar radicalmente la clase de resultados que estás obteniendo, el mejor camino para hacerlo es comenzar a forjar hábitos de excelencia. Un buen conjunto de hábitos puede hacer más por tu realización, resultados y felicidad que ninguna otra cosa. Los hábitos son los cimientos sobre los que se construyen los grandes resultados. Hábitos como por ejemplo la disciplina y constancia en tu trabajo, hacer ejercicio de manera consistente, mantener una dieta saludable o planificar efectivamente cada jornada… son la base requerida para lograr grandes resultados en la vida.
Sin el “soporte estructural” de esos hábitos resulta mucho más complicado avanzar hacia el logro de cualquier tipo de objetivo que te propongas en tu vida. Un buen ejercicio que puedes llevar a cabo es tomar algo de tiempo para determinar que tipo de hábitos necesitas cultivar como base para facilitar tu avance hacia todos aquellos objetivos que realmente deseas para tu vida.
Siempre el enfoque inicial en todo proceso de cambio positivo ha de estar basado en forjar un buen grupo de hábitos positivos que permitan desarrollar después con efectividad aquellos objetivos que te propongas.
Así pues, permíteme formularte una pregunta: ¿Qué hábitos necesitas desarrollar para revolucionar el nivel de tus resultados en tu vida?
Y obviamente con esto no me refiero a la cantidad de resultados, sino a la CALIDAD de esos resultados.
Toma unos instantes y haz esa lista.
Tal vez necesites forjar el hábito de hacer ejercicio todos los días, o el hábito de leer y estudiar algún material positivo de manera consistente a diario, o el hábito de levantarte más temprano cada día, o tal vez el hábito de planificar por anticipado cada una de tus semanas de manera más efectiva… Solo tu conoces realmente la clase de hábitos que necesitas forjar y que supondrían un cambio y un impacto realmente positivo en tu desempeño y resultados. Así pues, actúa en consecuencia. Haz esa lista de hábitos a forjar y comienza a actuar en consecuencia. Lo mejor es comenzar a forjar uno de esos hábitos, controlando cada día que efectivamente lo estás haciendo, y una vez implantado ese primer hábito pasar al siguiente. De este modo, podrás enfocar plenamente toda tu energía y enfoque en un solo hábito, y el proceso de implementarlo se vuelve mucho más poderoso y se maximizan las posibilidades de tener éxito en el empeño.
Imagina que a lo largo de este próximo año consigues implantar unos cuantos hábitos positivos en tu vida. Piensa por un instante en las enormes repercusiones a nivel de resultado que esos hábitos pueden aportar a tu vida. Te garantizo que se convertirán en los cimientos de grandes logros y de tu evolución y crecimiento personal. Te aportarán fortaleza emocional y la sana sensación de ser mejor y más efectivo cada día. Y sobre todo, te ayudarán a desatar de manera mucho más efectiva todo tu auténtico potencial.
© 2010 JOSE MARIA VICEDO
Sin el “soporte estructural” de esos hábitos resulta mucho más complicado avanzar hacia el logro de cualquier tipo de objetivo que te propongas en tu vida. Un buen ejercicio que puedes llevar a cabo es tomar algo de tiempo para determinar que tipo de hábitos necesitas cultivar como base para facilitar tu avance hacia todos aquellos objetivos que realmente deseas para tu vida.
Siempre el enfoque inicial en todo proceso de cambio positivo ha de estar basado en forjar un buen grupo de hábitos positivos que permitan desarrollar después con efectividad aquellos objetivos que te propongas.
Así pues, permíteme formularte una pregunta: ¿Qué hábitos necesitas desarrollar para revolucionar el nivel de tus resultados en tu vida?
Y obviamente con esto no me refiero a la cantidad de resultados, sino a la CALIDAD de esos resultados.
Toma unos instantes y haz esa lista.
Tal vez necesites forjar el hábito de hacer ejercicio todos los días, o el hábito de leer y estudiar algún material positivo de manera consistente a diario, o el hábito de levantarte más temprano cada día, o tal vez el hábito de planificar por anticipado cada una de tus semanas de manera más efectiva… Solo tu conoces realmente la clase de hábitos que necesitas forjar y que supondrían un cambio y un impacto realmente positivo en tu desempeño y resultados. Así pues, actúa en consecuencia. Haz esa lista de hábitos a forjar y comienza a actuar en consecuencia. Lo mejor es comenzar a forjar uno de esos hábitos, controlando cada día que efectivamente lo estás haciendo, y una vez implantado ese primer hábito pasar al siguiente. De este modo, podrás enfocar plenamente toda tu energía y enfoque en un solo hábito, y el proceso de implementarlo se vuelve mucho más poderoso y se maximizan las posibilidades de tener éxito en el empeño.
Imagina que a lo largo de este próximo año consigues implantar unos cuantos hábitos positivos en tu vida. Piensa por un instante en las enormes repercusiones a nivel de resultado que esos hábitos pueden aportar a tu vida. Te garantizo que se convertirán en los cimientos de grandes logros y de tu evolución y crecimiento personal. Te aportarán fortaleza emocional y la sana sensación de ser mejor y más efectivo cada día. Y sobre todo, te ayudarán a desatar de manera mucho más efectiva todo tu auténtico potencial.
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Un simple cambio de enfoque, una tremenda diferencia.
Publicado por jmvicedo el jueves, 7 de enero de 2010 a las 12:17 a. m..
Las personas que suelen postergar la mayoría de sus tareas tienden a enfocar siempre en el PROCESO que tendrán que seguir para completar la tarea.
En contraposición, las personas que suelen tomar acción masiva, tienden a enfocar siempre en la RECOMPENSA que conseguirán cuando sus acciones se completen.
Piensa por un instante en cual es tu caso. Al enfrentarte a cualquier proyecto, ¿en que sueles enfocar, en todas las tareas que tendrás que realizar o en la recompensa que te espera una vez esté realizado?
Reflexiona un poco sobre esta respuesta y encontrarás aquí las claves de por que en ocasiones estas postergando algunos proyectos. Y no solo eso, tal vez descubras por que hasta ahora te ha faltado motivación para perseguir alguno de tus objetivos.
Enfoca siempre en la recompensa, y solo después de crear esa imagen clara del resultado final esperado, comienza a planificar los pasos que tendrás que dar para que esa fantástica visión se convierta en realidad. Te garantizo que la diferencia en tus resultados será tremenda.
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En contraposición, las personas que suelen tomar acción masiva, tienden a enfocar siempre en la RECOMPENSA que conseguirán cuando sus acciones se completen.
Piensa por un instante en cual es tu caso. Al enfrentarte a cualquier proyecto, ¿en que sueles enfocar, en todas las tareas que tendrás que realizar o en la recompensa que te espera una vez esté realizado?
Reflexiona un poco sobre esta respuesta y encontrarás aquí las claves de por que en ocasiones estas postergando algunos proyectos. Y no solo eso, tal vez descubras por que hasta ahora te ha faltado motivación para perseguir alguno de tus objetivos.
Enfoca siempre en la recompensa, y solo después de crear esa imagen clara del resultado final esperado, comienza a planificar los pasos que tendrás que dar para que esa fantástica visión se convierta en realidad. Te garantizo que la diferencia en tus resultados será tremenda.
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Cada día, un "momento mágico".
Publicado por jmvicedo el lunes, 4 de enero de 2010 a las 12:30 a. m..
Mientras definía lo que van a ser mis objetivos para 2010, me vino a la cabeza un objetivo que creo que puede tener un impacto altamente positivo en la vida de cualquier persona que se lo plantee. Durante el próximo año, uno de mis objetivos será crear al menos un “momento mágico” y especial cada día. No se trata de buscar logros extraordinarios de manera constante, sino de crear de manera consciente momentos especiales cada día, que queden para siempre en el recuerdo. Y para ello, generalmente todo lo necesario para lograrlo se reduce a estar más presente en el presente. Simplemente consiste en tomar conciencia de la grandeza que esconden situaciones que habitualmente ni percibimos porque tomamos como triviales o demasiado cotidianas. Pero si les prestamos una verdadera atención, y además hacemos un esfuerzo consciente por magnificarlas, esas situaciones se transforman en momentos verdaderamente únicos y especiales.
La sonrisa de un niño, seguida de un comentario positivo por tu parte resaltando su fantástica actitud, un momento de charla sincera con tu pareja o con alguna amistad, añadir algún detalle que convierta en especial una comida, saborear intensamente la lectura de un buen libro, un momento de profunda reflexión y recogimiento espiritual, ofrecer tus habilidades de manera altruista a alguien que lo necesite, contemplar un fantástico amanecer, hacer algo que nunca has hecho antes… Todos tenemos cada día montones de oportunidades para crear momentos realmente especiales. Todo lo que necesitamos para hacerlo es simplemente comprometernos a ello.
Y no solo te animo a ponerlo en práctica, sino que te invito a que lleves un pequeño registro de todos esos momentos. Imagínate a final de este nuevo año con una lista de al menos 365 nuevos momentos “mágicos” y especiales en tu vida. ¿No sería algo realmente extraordinario y fantástico? Te garantizo que significaría una tremenda diferencia positiva y el mejor regalo que podrás recibir a final de este nuevo año.
Y demás, la recompensa de este simple ejercicio es la mayor de todas. Vivir una vida plena de momentos especiales. Esa clase de momentos que son los que recordaremos al final de nuestros días como los que realmente han dado un significado profundo a nuestra vida. Bien vale la pena el reto.
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La sonrisa de un niño, seguida de un comentario positivo por tu parte resaltando su fantástica actitud, un momento de charla sincera con tu pareja o con alguna amistad, añadir algún detalle que convierta en especial una comida, saborear intensamente la lectura de un buen libro, un momento de profunda reflexión y recogimiento espiritual, ofrecer tus habilidades de manera altruista a alguien que lo necesite, contemplar un fantástico amanecer, hacer algo que nunca has hecho antes… Todos tenemos cada día montones de oportunidades para crear momentos realmente especiales. Todo lo que necesitamos para hacerlo es simplemente comprometernos a ello.
Y no solo te animo a ponerlo en práctica, sino que te invito a que lleves un pequeño registro de todos esos momentos. Imagínate a final de este nuevo año con una lista de al menos 365 nuevos momentos “mágicos” y especiales en tu vida. ¿No sería algo realmente extraordinario y fantástico? Te garantizo que significaría una tremenda diferencia positiva y el mejor regalo que podrás recibir a final de este nuevo año.
Y demás, la recompensa de este simple ejercicio es la mayor de todas. Vivir una vida plena de momentos especiales. Esa clase de momentos que son los que recordaremos al final de nuestros días como los que realmente han dado un significado profundo a nuestra vida. Bien vale la pena el reto.
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